Cómo proteger a los niños de la explotación sexual

Como anfitrión, podés tomar medidas para ayudar a mantener la seguridad de los niños en tu alojamiento y evitar que sean víctimas de explotación sexual. Con este objetivo, te pedimos que, si sospechás de alguna situación que pudiera considerarse explotación sexual infantil, hagas tu denuncia a la CyberTipline. Además, si tenés cámaras en tu alojamiento o en el perímetro, tenés que cumplir con la política acerca del uso de cámaras y dispositivos de grabación de Airbnb. Tal como establece la política, los dispositivos no pueden monitorear espacios privados y tienen que mencionarse en la descripción de tu anuncio para que los huéspedes estén informados.

Qué es la explotación sexual infantil

La explotación sexual infantil puede perpetrarse de diferentes formas y generalmente se define de la siguiente manera:

1. La coerción o manipulación de un menor para someterlo a algún tipo de acto sexual.
2. El uso de menores en prostitución u otras prácticas sexuales.
3. El uso de menores en actividades, actos y material pornográficos.

Señales a tener en cuenta

Es posible que los niños que sufren de abuso sexual muestren ciertos comportamientos característicos de una persona que vivió un trauma. A continuación, presentamos algunos indicadores comunes que pueden ser señales de que un niño sufrió explotación sexual:

• Signos físicos de abuso
• Parece estar bajo los efectos del alcohol o alguna droga
• Contacto físico inapropiado entre un niño y una persona adulta

La explotación sexual infantil puede ocurrir tanto en línea como en persona, y los estudios demuestran que 1 de cada 5 niñas y 1 de cada 20 niños van a sufrir algún tipo de abuso sexual antes de cumplir 18 años. Las personas jóvenes del colectivo LGBT tienen aproximadamente 7,4 veces más posibilidades de ser víctimas de violencia sexual que una persona joven heterosexual sin hogar.

Reducimos el riesgo de explotación sexual infantil

Si los anfitriones tienen cámaras en sus alojamientos, no está permitido que las ubiquen en espacios privados como dormitorios y baños. Se debe informar a los huéspedes acerca de todos los dispositivos que estén en los espacios comunes. Así, las personas adultas van a poder tomar las medidas necesarias para evitar la posibilidad de que se capturen imágenes que muestren desnudos a los menores que se hospedan en el alojamiento. También es importante que los anfitriones establezcan controles de seguridad informática para evitar que alguien hackee las cámaras y las use para capturar imágenes de los menores desnudos.

Para más información sobre cómo prevenir la explotación sexual infantil, podés acceder al material educativo del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC), el ECPAT de EE. UU. y el Centro Internacional para Niños Desaparecidos y Explotados (ICMEC).