Consejos de limpieza de anfitriones experimentados

Un espacio impecable ayuda a que los huéspedes la pasen bien y fomenta evaluaciones excelentes.
Por Airbnb el 9 de mar. de 2023
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Actualizado el 9 de mar. de 2023

Si tu espacio está limpio, es más probable que recibas evaluaciones excelentes. La falta de limpieza, por otro lado, suele ser el problema que más motiva una evaluación negativa. Probá estos consejos de anfitriones con experiencia para mantener tu alojamiento impecable.

Creá una estrategia de limpieza

Ya sea que te encargues vos de la limpieza o contrates a alguien, es fundamental que se limpie a fondo el alojamiento después de cada estadía, sin excepciones.

“Es importante ser consistentes y tener listas de verificación para el personal de limpieza”, señala Juliette, miembro del Consejo asesor de anfitriones en Nairobi, Kenia. “Es muy útil porque se convierte en una rutina. Así, te asegurás de que el espacio quede realmente limpio”.

Si vas a contratar a alguien para que se encargue de la limpieza, hacé una ronda de prueba por tu cuenta para saber exactamente qué tareas son necesarias y qué tenés que incluir en las listas de verificación. No te olvides de reservar suficiente tiempo entre una reserva y la otra para hacer una limpieza completa. Tratá de contar siempre con otra persona que pueda encargarse de las tareas de limpieza si tu persona de confianza no está disponible.

Cuando limpiás para recibir a los huéspedes, tenés que prestar mucha más atención a los detalles de la que quizá prestarías al limpiar para vos. Considerá invertir en limpiezas profundas una vez cada tanto, para que las tareas de rutina entre una reserva y otra sean menos intensas y más eficientes.

Empecemos por el principio

Juliette señala la importancia de enfocarte en ciertas áreas durante la limpieza.

  • Empezá por las áreas más transitadas. “La cocina y los baños son lo más importante porque son los espacios que más se usan”, explica Juliette. Una vez que los baños están impecables, sigue por la cocina, donde el personal de limpieza lava todos los platos. “Hacemos una limpieza completa”, comenta.
  • Siguiente paso: las habitaciones. El personal de limpieza de Juliette revisa los cajones, mira abajo de las camas y se asegura de que no haya quedado nada de los huéspedes anteriores. “Después, sacamos la ropa de cama y la ponemos a lavar. También abrimos todas las ventanas para que se ventile la casa”, explica.
  • Por último, Juliette prepara las camas. ¿Cómo lo hace? “Los colchones y las almohadas tienen protectores, así que cambiamos todo el conjunto”, cuenta.

Concentrate en los detalles

Pensá como un huésped. Por ejemplo, Tammi, anfitriona en Seattle, dice: “Muchas veces nos olvidamos de la cortina del baño. La mía tiene un revestimiento de plástico, que limpio con un rociador y un paño después de cada estadía. También la cambio cada mes o cada dos meses”.

Tampoco te olvides de limpiar las áreas que más se tocan, como los interruptores de luz. “Ese tipo de superficies pueden ensuciarse mucho, pero no lo notás porque te acostumbrás a que estén así”, comenta Adam, anfitrión en Atlanta. Pasarles un poco de alcohol debería ser suficiente”.

Fijate que no queden cabellos sueltos

A los huéspedes no les gusta encontrar cabellos ajenos en el alojamiento. Sue y John, anfitriones en Salt Lake City, tienen un consejo para resolver el problema: “Después de lavar toda la ropa de cama, les paso un rodillo quitapelusa a las sábanas, las fundas de los almohadones y las mantas”.

Laura, anfitriona en Cottonwood, Arizona, sugiere no usar la mopa. Explica: “Limpiá los pisos del baño de rodillas con las manos”, usando un cepillo o un paño de microfibra. “Es más fácil y rápido. Además, así te asegurás de que no queden cabellos”. Acordate también de limpiar los desagües del baño después de cada estadía.

Probá los consejos de otros anfitriones

A continuación, te presentamos algunos hábitos de limpieza de anfitriones con experiencia:

  • Primero poné la ropa a lavar. “Lo primero que hago es recoger todas las sábanas y toallas y ponerlas en el lavarropas, para que se laven mientras hago el resto de la limpieza, explica Emma-Kate, anfitriona en San Francisco. Es una forma eficiente de administrar el tiempo”.
  • Pulí los pisos de madera. “Como tengo pisos de madera, los pulo cada tanto para que estén relucientes cuando lleguen los huéspedes”, comenta Tammi, anfitriona en Seattle. Eso da una sensación de limpieza general muy reconfortante”.
  • Doblá la punta del papel higiénico. “Siempre doblo la punta del papel higiénico al final del rollo”, comenta Emma-Kate. Es algo menor, pero demuestra que el espacio está limpio y que me preocupo por los detalles”.
  • Rellená las botellas de jabón para las manos y shampoo. “Siempre es agradable tener artículos de tocador que parezcan nuevos”, señala Alex, anfitrión en San Francisco. “Si la botella está llena y sin abrir, uno se olvida de que hubo otros huéspedes antes”.
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9 de mar. de 2023
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